El inicio del TDAH en la infancia comporta sintomatología que, dependiendo del subtipo, puede estar más relacionada con la falta de atención, la hiperactividad o la impulsividad. Podemos observar los siguientes síntomas en niños y adolescentes:
Falta de atención:
Esta sintomatología está relacionada con problemas de aprendizaje centrados en la lectoescritura y las matemáticas, con un ritmo de procesamiento más lento. Suelen tener problemas de rendimiento escolar y acostumbran a olvidarse de la realización de deberes, llevar material al colegio o instituto, exámenes o citas importantes. Es muy común que no recuerden las consignas y pierdan el hilo de las conversaciones. Suelen ser personas olvidadizas, muy sensibles a la distracción. Suelen ser niños y adolescentes más bien pasivos y con tendencia a la ansiedad.
Hiperactividad:
Se suelen relacionar los problemas de hiperactividad con niños a los que les cuesta permanecer tranquilos a nivel motor, estar sentados o quietos y que parece que nunca agotan sus energías. Son niños más propensos a participar en juegos activos y deportes que no a elegir juegos de tipo estático. Suelen disfrutar en espacios abiertos y libres donde pueden correr, saltar… En cambio, suelen tener más problemas en entornos como el escolar, en un restaurante o en la sala de espera del médico por sus dificultades para autorregular su movimiento y a menudo necesitan de regulación externa mediante premios, acompañamiento del adulto… Suelen ser niños a los que les cuesta parar y rebajar el nivel de activación al final del día. En la infancia suelen pasar más desapercibidos los primeros años, pero sus dificultades hipercinéticas se hacen muy evidentes por su intensidad.
Impulsividad:
Pueden tener muchas dificultades a nivel de interacción social por sus dificultades de autocontrol de la conducta y afectar a su autoestima. A menudo son rechazados por sus iguales por hacer trampas en los juegos en edades más tempranas y en la adolescencia pueden tener conductas disruptivas o de riesgo por esa poca capacidad de planificación y reflexión previa que les lleva a tener amistades diversas. Emocionalmente pueden ser más inestables y con marcadas fluctuaciones. Pueden desencadenarse problemas relacionados con la conducta o con el Trastorno Negativista Desafiante.
El Servicio de Psiquiatría, Psicología y Medicina Psicosomática del Hospital Universitario Quirón Dexeus tiene 35 años de existencia. Desde sus inicios siguió el modelo de conjunción que aúna los conocimientos de la biología del Sistema Nervioso –y sus consecuencias terapéuticas, los psicofármacos- y las psicológicas, basadas en las teorías del aprendizaje y con un sólido fundamento científico, siendo su corolario terapéutico la terapia cognitivo-conductual.
Sabino de Arana, 5-19
Consultas Externas Planta 3. Consulta 3.5
08028 - Barcelona
Tel. (+34) 93 205 85 11 Fax (+34) 93 205 85 12
e. psiquiatria@psicodex.com
w. http://www.psiquiatriapsicologia-dexeus.com
(c) 2024 Psicodex